Se están abriendo nuevas posibilidades, incluyendo oportunidades para salir de la carencia y entrar en el flujo de la abundancia y la prosperidad.
«Yo, (añade tu nombre) …
Abro los brazos y recibo la prosperidad que el Universo tiene para mí.
Abro mi corazón y siento en su interior el flujo constante de infinita riqueza.
Siento gratitud por la abundancia que el cielo me entrega.
Pongo las manos en mi corazón y declaro
que no me quedaré en estas palabras, que pasaré a la acción
para realizar todo lo necesario
hasta plasmar en mi realidad los tesoros que el cielo guarda para mí.
La abundancia y la prosperidad comienzan hoy en mi interior.
Así es, así será.
Gracias, gracias, gracias…»
La abundancia es la verdadera naturaleza de lo Divino, y la verdadera naturaleza de todos y cada uno de los seres humanos